la lectura como alimento para el cerebro

tras su aprendizaje, la lectura parece un proceso que ocurre de forma innata en nuestra mente. la realidad es que leer es una actividad antinatural, en la antigüedad no estar alerta podía costar la vida de nuestros ancestros, si un cazador no atendía a los estímulos que lo rodeaban era devorado o moría de hambre por no saber localizar las fuentes de alimento. por ello permanecer inmóvil concentrado en un proceso como la lectura es algo antinatural. solo la lectura exige un nivel de concentración tan profunda al combinar el deciframiento del texto y la interpretación de su significado. aunque la lectura sea un proceso forzado. la mente recrea cada palabra activando numerosas vibraciones intelectuales, cuando se lee el hemisferio izquierdo del cerebro trabaja a alta velocidad para activar las diferentes áreas, la corteza inferotemporal, área especializada en detectar palabras escritas se activa, transmitiendo la información hacia otras regiones cerebrales. y este proceso se repite constantemente mientras se lee.

"La capacidad lectora modifica el cerebro" afirma el neurólogo stanistas dichacne. Su afirmación es correcta puesto que hay más materia gris en la cabeza de una persona lectora y más neuronas en los cerebros que leen.

Al cobrar vida cada palabras, la imaginación hecha a volar, el poder de la mente es tan fuerte que recrea lo imaginado. Activando las mismas áreas cerebrales que se accionarian si se ajecutara la acción en la realidad. "los lectores simulan mentalmente cada nueva situación que se encuentran en una narración. Los detalles de las acciones registradas en el texto de integran se integran en el conocimiento personal de las experiencias pasadas".

La lectura además de alimentar y favorecer la concentración. Nos ayuda a mejorar la empatia, un lector rápidamente aprende a identificarse con los personajes de las historias que lee y está dispuesto a abrirse a otras vidas.